La determinación es un término que viene ganando popularidad dentro del mundo de los negocios. Si bien es un rasgo emocional que cualquier persona puede tener en cualquiera de los aspectos de la vida, su relevancia dentro del entorno empresarial se ha vuelto muy notable.
En términos muy simples, la determinación es la capacidad de una persona para sobrellevar las dificultades impuestas por el azar de la vida, ir en contra de ellas y seguir perseverando. Esta increíble característica se suele confundir con el optimismo o con la paciencia, quedando estas últimas muy cortas en comparación.
El líder que goza de determinación tiene mayores posibilidades de éxito, pues pocas situaciones le resultan fatalistas. A continuación, hablaremos de tres características claves de quien posee este útil rasgo, tanto para los negocios como para la vida en general.
El líder con determinación supera los eventos trágicos con notable facilidad
Una clara característica de quien goza de determinación es poder sobrellevar las situaciones negativas con facilidad y en poco tiempo, también llamada resiliencia. Un líder con determinación puede, sin dedicarle demasiado tiempo, dejar atrás un evento sumamente negativo para su empresa.
Ejemplo, si como líder eres capaz de superar emocionalmente, de un momento a otro, una pérdida considerable del valor en bolsa de tu organización y seguir adelante con nuevas estrategias para recuperar el valor perdido, tienes determinación.
Parte importante de la determinación es darle sepultura a los eventos de carácter negativo que ya sucedieron. Lo importante es lo que viene, no concentrarse en lo sucedido, pues no tenemos ningún control sobre ello.
El líder con determinación se compromete con metas a largo plazo
La determinación nos permite sacrificar el placer inmediato a favor de lo que viene después. Si bien a esto se le puede llamar paciencia, nos estamos refiriendo a recompensas a muy largo plazo.
¿Dedicarías años de trabajo y sacrificios para ver el resultado solo al final?
El líder con determinación no solo es capaz de comprometerse inquebrantablemente con estas duras metas, sino también influir en quienes forman parte del equipo de trabajo para que simpaticen con este duro reto.
Dejar de lado la gratificación inmediata es una clara característica de la determinación, ya forjado dentro del carácter de hombres y mujeres en el rol de líderes.
El líder con determinación se esfuerza para ofrecer resultados más allá de cualquier expectativa
La mitad del trabajo está hecho cuando nos comprometemos a llegar más allá de lo que se espera de nosotros. Pocos líderes a día de hoy alcanzan la efectividad que desean porque no están dispuestos a esforzarse más de lo que se espera de ellos.
Hacer las cosas mejor, más allá de las expectativas de los superiores o los clientes, también forma parte de la determinación. Podríamos también reconocer esta característica como una búsqueda por la perfección que nunca se logra satisfacer, alcanzando los más altos estándares.
Sin embargo, el líder con determinación no cae en desesperación ni frustraciones, aporta su esfuerzo siempre y lanza el resultado, esperando lo mejor. Este máximo esfuerzo implica muchas revisiones y atención a los detalles, algo que el líder promedio no está dispuesto a hacer.
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