Si no sabes a dónde vas ni cómo llegar, ¿Cómo llegarás?
Terminó la pausa natalicia, me sirvió para hacer una reflexión acerca del famoso 2020 y lo más importante, definir mis planes para el 2021.
Las situaciones complicadas siempre nos enseñan algo trascendental, es muy importante capitalizar estos aprendizajes, definir lo que queremos cambiar en nuestra vida y cómo sostener este cambio.
Siempre decimos que los propósitos de fin de año duran hasta finales de enero, después ya nos olvidamos y todo regresa como antes. Esta estadística la puedes cambiar si quieres; depende de ti, de cada uno de nosotros.
Quieres vivir este 2021 igual que los últimos diez años, o quieres cambiar algo trascendental en tu vida para iniciar un nuevo ciclo, donde tu decides lo que quieres que ocurra?
Lo podemos llamar propósito, visión, camino. Si eres un ejecutivo estas acostumbrado a preparar planes de acción, modificarlos cuando es necesario, reaccionar de forma rápida para corregir el rumbo, haciendo frente a los imprevistos que siempre ocurren.
Vivimos en un mundo VUCA, de cambios constantes, de incertidumbre, de volatilidad, de ambigüedad. Habilidades como agilidad, resiliencia, coraje y determinación son fundamentales para nuestro rol de líderes. Y aún más cuando somos líderes de un equipo o de una empresa.
Terminamos el 2020 con mucho miedo, estrés, incertidumbre. Estas emociones no desaparecieron, no van a desaparecer de inmediato con la vacuna para el COVID.
Tu rol como líder es dar el ejemplo, así que debes ser el primero en tener las ideas claras, el que toma las decisiones, el que indica el camino.
Lo que he aprendido en estos 30 años es que el liderazgo personal es el pilar mas importante de un líder exitoso. Podemos comparar el camino al liderazgo como subir una montaña de 5000 metros de altura. Para incrementar las probabilidades de lograr llegar a la cima debes prepararte bien físicamente, mentalmente, emocionalmente y espiritualmente; todo es un conjunto, somos un individuo líder de nuestras decisiones, líder de nuestra vida, líder de los resultados de nuestros comportamientos y nuestras acciones.
La primera etapa es la más importante, definir tu propósito, contestar preguntas como:
¿Por qué es importante para mi?
¿Cómo me sentiré cuando lo logre?
¿Y si no lo intento, que pasará conmigo?
¿Qué debo hacer para lograrlo?
¿Cuál es mi plan de acción?
¿Qué recursos necesito?
¿Qué voy a tener cuando lo logre?
¿Cómo cambiará mi vida?
Como puedes ver, son las mismas preguntas que seguramente te haces muchas veces a lo largo de un año o de un trimestre si tu empresa está en la bolsa. El problema es que casi nunca nos hacemos estas preguntas para nuestra vida, preferimos ser reactivos y adaptarnos a las circunstancias.
Después nos quejamos, estamos insatisfechos, porque no encontramos agrado en lo que hacemos. Nos falta definir cuál es nuestro propósito.
Esto vale también para nuestra carrera profesional. Me pasa seguido escuchar personas que no están felices con su trabajo, en la empresa donde están. Depende de ti buscar un cambio. A veces nuestro nivel de inconformidad es tan alto que afecta nuestro desempeño y entonces los demás nuevamente toman decisiones para nuestro futuro.
Nuevamente son eventos críticos que nos empujan a tomar acción para nuestra vida, y en realidad tenemos la oportunidad de definir nosotros lo que nos gustaría hacer. No es fácil, al igual que subir una montaña es un camino difícil, pero con las ideas claras, la determinación, la acción y el coraje, se puede lograr.
Te comparto que para mi fue así. Después de pocos años de ser contralor financiero entendí que lo que me gustaba hacer era liderar equipos, empresas, iniciativas, proyectos orientados al futuro, al crecimiento. Quería ser director general; este era mi camino, al principio nadie te cree, en esa época tenía 30 años y poca experiencia.
Salió una oportunidad en la empresa donde trabajaba de ir a España a liderar un proyecto de turnaround y me apunté. Las circunstancias me ayudaron, pero mas que nada fue mi determinación y claridad en el camino que quería. Esta fue la primera etapa de mi ascenso profesional.
Te invito a reflexionar sobre ti mismo. Aquí te dejo estos puntos claves: ¿Eres el líder que quieres ser? o sientes que te falta algo, que no tienes claro donde quieres ir?
¿Estas en la empresa correcta, estas creando valor para ella, o eres uno que si no se presenta nadie se da cuenta?
¿Eres líder de tu equipo, eres un ejemplo para ellos, eres de los que practica lo que predica, ellos quieren ser como tu, saben que pueden contar contigo por cualquier cosa?
Si estas interesado en compartir conmigo tus dudas o reflexiones, tomémonos un Café Virtual y conversemos acerca de tus planes. Puedes reservar aquí: https://go.oncehub.com/GuidoCattaneo